Educación digital y comunicación familiar, claves en el buen uso de las pantallas

Nueva temporada del programa Ser en Redes, en el Hoy por Hoy de Radio Jerez de la cadena Ser

Después de un pequeño parón en los artículos publicados en este blog que, con tanta ilusión y, sobre todo responsabilidad, empecé a escribir en 2016, me siento en la obligación moral de recuperarlo.

Muchas horas de dedicación personal, con la ilusión de ayudar a jóvenes y adultos en este reto digital, pero también con el cansacio de sentir que la formación en el buen uso de las tecnología, desgraciadamente, sigue sin situarse como una prioridad absoluta entre las administraciones, a pesar del tsunami digital, al que asistimos ya desde hace más de una década.

Si repasamos los artículos publicados cuando comencé a escribir este blog, como madre de hijos adolescentes y aprovechando la oportunidad que me daba ser periodista, en lugar de avanzar en su buen manejo, me atravería a decir, sin miedo a exagerar, que el asunto se nos ha ido de las manos, a pesar de las continuas alertas y las advertencias de los expertos en la materia, que llevan años avisando de la importancia de formar a la población en los nuevos retos que ofrece la tecnología, conociendo sus peligros.

El papel de los medios de comunicación

Afortunadamente, aunque poco hemos avanzado en el último lustro en su buen uso, sí es cierto que la sociedad parece cada vez más concienciada de la necesidad de formarse gracias a la labor de los medios de comunicación y, por supuesto, gracias a la formación que se imparten desde distintos organismos e instituciones, a través de talleres, y al gran trabajo de las Fuerzas y Cuerpos de Seguriad del Estado; pero, desgraciadamente, no es suficiente, son granitos de arena en un desierto que requiere un Pacto Nacional por la Educación, en el que se sitúe en lugar prioritario la tan necesaria y urgente educación digital en el aula.

El papel de los medios es fundamental en este trabajo de concienciación. En los últimos años estamos viendo, casi a diario, noticias que me atrevería a decir que tienen su origen en la bomba de relojería que supone sumar los siguientes factores de riesgo: el uso abusivo de las pantallas (más de 5 horas al día), el acceso a contenido inapropiado a edades cada vez más tempranas, normalizando conductas en las relaciones sexuales que nada tienen que ver con la realidad, las horas interminables frente a viodeojuegos cada vez más violentos, todo ello unido al consumo de drogas de diseño y alcohol.

El resultado de esta suma se podría decir, sin temor a equivocarse, es lo que estamos viendo en los informativos: violaciones grupales, conductas violentas, ciberacoso, cibercontrol, aumento de los suicidios entre los más vulnerables, problemas de salud mental y física, accidentes por uso del móvil hasta altas horas de la madrugada….Y así podría seguir enumerando el desolador panorama al que nos enfrentamos si no se actúa con urgencia.

Los medios de comunicación están haciendo visibles los problemas derivados del manejo de la tecnología de forma intuitiva, sin límites ni normas en su uso. Ahora les toca a las administraciones analizar todas estas informaciones y situar de una vez, como prioridad absoluta, la educación digital en el sistema educativo español, tal y como marca la ley desde 2018.

La demanda cada vez mayor de talleres formativos en alfabetización mediática y digital ponen en evidencia la urgencia de incorporar estas formaciones como asignaturas.

Adiós a los ordenadores en el aula, prohibir no es el camino

Desgraciadamente, en lugar de aprovechar las oportunidades que ofrece la era digital, estamos asistiendo a un verdadero desconcierto, empezando incluso a ver cómo algunos centros educativos y universitarios de nuestro país empiezan a prohibir el uso de los ordenadores en el aula, volviendo al metodo tradicional de toma de apuntes con cuaderno.

Parece sorprendente que el pequeño que ha crecido con el móvil como sonajero, ahora tiene que renunciar a la tecnología en el aula, aunque en su trabajo se le exigirá manejarla al dedillo. Los extremos no son buenos, pongamos la tecnología a su servicio y busquemos un modelo híbrido.

Países como Francia, Italia, Suecia o Filandia ya han prohibido el móvil en el escuela; esta decisión tan drástica, quizás, sea la solución mientras no se asuma la responsabidad de educar en su uso saludable y responsable. En mi opinión, la fomación debería ser el camino para avanzar en una sociedad más libre en la que la tecnología esté a su servicio.

En nuestro país no existe una normativa nacional que regule el uso del móvil en el aula, dejando esta opción en manos de las comunidades autónomas que son las que tienen las competencias en educación. Algunas comunidades como Castilla-La Mancha, Galicia y Madrid han optado, de momento, por prohibirlo, mientras otras regiones lo ha dejado en manos de los propios centros o profesores.

Prohibir no es el camino ni volver a métodos de estudio tradicionales, hablamos de alumnos hiperconectados que viven, se comunican y estudian en digital; sin embargo mientras no se forme a los alumnos en su buen uso, puede ser una medida de emergencia ante lo que estamos viendo.

Me decía hace unos días, un joven universitario, con cierto enfado e incompresión, que este año les habían prohibido el ordenador en clase y que él no sabía coger apuntes con bolígrafo, la excusa es que era muy lento y no podía seguir el ritmo al profesor; la verdad que llevaba su parte de razón, si tenemos en cuenta que estos niños teclean con sus diminutos dedos a una velocidad jamás vista (práctica no les falta con el móvil).

Me explicaba que el motivo era la distracción a causa de Internet, dicho de otra manera, estar comprando online en Vinted o chateando en redes sociales mientras el profesor se afanaba en explicar su temario…La verdad que el argumento tenía sentido, al escucharle mi primer pensamiento me llevo de nuevo a mi teoría del actual deorden, por no llamarlo absoluto caos: Esto se nos ha ido de las manos, estamos más perdidos que nunca porque la tecnología ha entrado en nuestras vidas como un ciclón y hemos hecho caso omiso de las alertas.

La dictadura del like

Después de esta pequeña reflexión y, ante lo que estamos viendo en los medios de comunicación, ya no nos hacen falta datos ni estudios, basta con mirar a nuestro alrededor y en nuestros propios hogares para comprender la magnitud del problema.

La presión por obtener más y más likes a costa de lo que sea, los influencer que suben como la espuma cuantas más tonterías digan o hagan, todo vale para lograr la fama en las redes sociales, mientras vemos como sufren los menores que no logran destacar en su mundo de Internet o que son víctimas del ciberacoso o el cibercontrol, o, del algo tan terrible como es el sexting o el grooming.

Los pederastas han encontrado su refugio en la Red, donde utilizan identidades falsas para acercarse a los más vulnerables….No se trata de asustar o meter miedo, pero sí de no dar la espalda a los verdaderos problemas que plantea la transición tecnológica a la que asistimos sin ser verdaderamente conscientes de lo que implica a nivel formativo.

La Inteligencia Artificial, una gran oportunidad que puede acabar dominándonos

Hago un inciso para advertir de las gravísimas consecuencias que puede tener el uso intuitivo de la Inteligencia Artificial, una poderosa y valiosa herramienta para dar soluciones rápidas a los problemas, que puede mejorar sensiblemente nuestras vidas o convertirlas en una auténtica pesadilla, si no se ponen límites a su uso y, sobre todo, si no se dan una formación para su uso ético y responsable.

No debemos olvidar que los datos son el petroleo del siglo XXI y estamos empezando a usar programas de IA especialmente diseñados para hacerse con nuestra información, mientras nos divertimos con aplicaciones que nos invitan a vernos más guapos o dándole a ChatGPT información privada de la empresa por desconocimiento de las reglas básicas en ciberseguridad.

Nueva temporada en Ser en Redes

Soy defensora de las grandes oportunidades que ofrece la tecnología y, por supuesto, la IA, siempre que esté a nuestro servicio y no al contrario. Para aprovechar sus beneficios es vital formar primero a padres y profesores.

Hemos querido comenzar la nueva temporada de Ser en Redes, volviendo a reivindicar, y no nos cansaremos de hacerlo, el Derecho a la Educación Digital, recogido en el artículo 83 de la Ley de Protección de Datos y Garantía de Derechos Digitales, que entró en vigor en 2018.

Este artículo obliga a las administraciones a garantizar la inserción de nuestros menores en la sociedad digital y a dotarlos de las competencias digitales necesarias para poder adaptarse a los cambios que ha traído la era digital.

Igualmente, recoge el deber de formar a profesores y a los padres. No me cansaré de reivindicar su aplicación de forma ambiciosa en el sistema educativo español, incorporando nuevas asignaturas que den respuesta a las demandas de la sociedad actual y que incluyan específicamente la alfabetización digital desde los tres años.

Comunicación familiar

Por último, incidir en la importancia de la comunicación familiar y el deber de los padres de formarse para poder acompañar a sus hijos en un mundo digital. Ya no hay excusa, para no saber, a estas alturas, que el hijo que prefiere quedarse encerrado en su cuarto, enganchado a una pantalla, en lugar de salir con sus amigos, puede correr más riesgos que el que sale de noche. La diferencia es que en el caso del primero nos mostramos tranquilos y en el caso del segundo le ponemos hora de llegada a casa y le preguntamos sobre sus amistades.

No debemos olvidar que por las calles de Internet circulan a sus anchas los ciberdelincuentes. Igual que les hemos enseñado a salir solos a comprar la primera barra de pan, alertándoles de los semáforos en rojo y de no hablar con desconocidos, pongamos interés en aprender sobre su mundo digital e incorporemos a las conversaciones familiares el influencer al que siguen, los amigos que tienen en las redes, en definitiva, todos sus gustos digitales.

2 respuestas a “Educación digital y comunicación familiar, claves en el buen uso de las pantallas

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